martes, 28 de abril de 2009

[ Fantasías animadas de ayer y hoy ]


Ya no saben ni que mamada sacar... eda?

lunes, 27 de abril de 2009

[ A casi un año ]

Cuando todavía traía mi corte de pelo chacal... me parece que me veía mejor entonces.!


martes, 21 de abril de 2009

[ Te compro una vida ]

[...] no vendo mi cuerpo,
yo lo regalo, lo ofrezco, lo exhibo
cuando tengo ganas de sentir
la rigidez erguida del hombre
encontrándome el sexo,
o cuando deseo la pasión caliente
de mi culo cuando lo tocas, lo besas,
lo devoras.
[...] y busco en cada hombre algo diferente,
algo que cambie mis noches y mis días
porque soy sexo a cualquier hora.
*[...] el amor es como yo
mujer de todos, a todas horas y no en silencio.
[...] no soy esclava.
No quiero tu casa, tu dinero, tu carro,
quiero tu cuerpo, tus manos, tu pene.
Te compro a ti.
No me vendo, me doy, me ofrezco,
te pago porque me hagas el amor
cuando yo quiera, cuando yo necesite.
Y cuando ya no funciones compro otro.
¿Te vendes?
Te compro...

[ Si no eres parte de la solución ... ]

Definitivamente eres parte del problema!
Como país nos indigna la forma en que tratan a nuestros compatriotas al cruzar la frontera, nos molesta la matanza de focas en Canadá o de ballenas por parte de Japón....

pero hacemos muy poco para detener y terminar con el trato discriminatorio hacia quienes desean vivir su sexualidad libremente,, sentimos que sus problemas no son ajenos, lejanos, porque no sabemos o no queremos saber de las violaciones a los derechos humanos, la violencia, acoso, discriminación, exclusión, estigmatización y prejuicio en contra de ellos.

Seria una buena idea, que la mayoría heterosexual conociera de esos abusos. En 77 países, la homosexualidad es ilegal...delito?, castigo?....

NO HAY DERECHO

Por que no repartir masivamente un documento que te enfrente, a tí heterosexual, con la idea de que no eres ajeno al problema y que ver y dejar de hacer, es también parte del problema...

se puede conseguir la atención de la gente, leyendo sobre los abusos que se cometen y los derechos que como ser humano y Mexicano se tienen, dejándolos con la sensación de que no se puede seguir en la actitud de indiferencia, se puede conseguir que como con la democracia, haga suya la idea de que es un problema de todos.

17 de mayo Día internacional contra la homofobia


Texto cortesía de Saúl L.
Gracias amigo.

sábado, 18 de abril de 2009

[ Una historia de "pelos" ]

Esta es una pequeña historia de una persona que ha vivido cerca el virus del VIH y perdió muchas amistades a causa de lo mismo. Ojalá les mueva algo.
Sergio y yo fuimos compañeros de banca desde la escuela secundaria, y fue ahí, en nuestra temprana adolescencia, cuando nos identificamos como gente "de ambiente"; en esos días, a mediados de la década de los setenta, el término gay ni siquiera era conocido en México como un adjetivo para referirse a personas homosexuales. Ya en la preparatoria, sumábamos un grupo de cuatro amigos inseparables e identificados por nuestra "tendencia": Álvaro, Jorge, Sergio y yo. Juntos, descubrimos en nuestra ciudad un mundo antes inexistente para nosotros, una constelación de personas, relaciones y lugares que nos daban identidad y nos hacían entender como legítima esa emoción que compartíamos, hasta entonces, en la clandestinidad de nuestra individualidad y complicidad.

Con el paso de los días y las semanas, el grupo de amigos creció y se sumaron compañeros nuevos y muy entrañables, como Víctor, Emilio, Daniel, Alejandro, Enrique, Miguel Ángel, José Antonio, Jaime, Carlos y otros más que incluso hoy permanecen tan cercanos como lo fuimos desde entonces.

Sergio y yo continuamos juntos nuestros estudios de preparatoria y también los universitarios, en la primera mitad de los años ochenta, además de compartir el gusto y la práctica de diversas expresiones artísticas que gozábamos enormemente desarrollar, como la pintura, la fotografía, el teatro y la música. Ello trajo consigo una complicidad muy estrecha que, hay que decirlo, no compartí tan intensamente con ningún otro de mis más amados amigos. Nuestra relación no estuvo exenta de competencia, sí, pero ésta siempre se tradujo en crecimiento y enriquecimiento espiritual, además del reconocimiento y respeto por las capacidades propias de cada uno de nosotros.

Hay que decir que, en cuanto a nuestra vida sexual, Sergio y yo compartíamos también gustos y hábitos, y muchas de nuestras aventuras corrían juntos. A ambos nos gustaban mucho el tipo de chicos que uno podía levantar en la Alameda Central o en la famosísima "esquina mágica" (allá en las calles de Insurgentes y Baja California, y que debía su nombre a que cuando uno pasaba conduciendo por ahí, veía a un chico parado en la esquina; pero al dar la vuelta y buscarle nuevamente, éste ya había desaparecido como "por arte de magia").
En esos años aún eran famosos y funcionaban los Baños Ecuador, en el Centro Histórico, donde se hacían verdaderas bacanales sexuales, orgías que jamás olvidaré, donde nutridos grupos de hombres de todas las razas y clases sociales nos reuníamos para tener, durante horas y horas, sexo en todas las maneras e intensidades imaginables. Sin duda que muchos de los recuerdos más exquisitos de mi temprana vida sexual, acontecieron entre las húmedas paredes de aquellos baños públicos y con los hombres más hermosos (o al menos así me lo parecieron) de los que tenga memoria.

El hábito de ir a los Baños Ecuador a mi se me quitó de sopetón; un mal día adquirí una horrenda gonorrea que se manifestó con una espantosa excreción de pus a través de mi uretra, se me quitó sólo después de tres dolorosas inyecciones de algún antibiótico que me aplicaron en el hospital del papá de Sergio. Después de ese traumático suceso -al menos lo fue para mi-, jamás volví a acompañar a mi amigo a esas orgías apoteósicas en los Baños Ecuador. Y el susto fue mayor cuando ya se comenzaba a escuchar del AIDS, una especie de cáncer que estaba matando a homosexuales en los Estados Unidos.

Definitivamente, el placer del sexo en grupo, las caricias frenéticas, las penetraciones indiferenciadas y las mamadas repetidas hasta perder la noción del tiempo, ya no era una opción que me diera tranquilidad en cuanto a mi vida sexual, así que preferí evitarlo totalmente. En cambio, Sergio continuó yendo frecuentemente a los baños, lo que era muy natural hacer siendo jóvenes con una vida sexual asumida; finalmente, para él, hijo de un médico, el adquirir alguna enfermedad venérea era un riesgo que se debía tomar y para el que -generalmente- había soluciones accesibles. Aunque él trataba de disimularlo frente a mi, su mejor amigo, yo me daba cuenta de que iba bien seguido a los baños, pues fácilmente podía notar que fmuy seguido mi amigo traía el pelo húmedo y sin peinar con la secadora (algo poco usual en él y en esa época). Me sentía temeroso por él, pero era un límite que yo sentía debía respetar.

Por aquellos días -el año de 1983 o 1984- se abrió en la Ciudad de México un nuevo antro llamado La Cantina del Vaquero, ubicado en un local del estacionamiento de una pequeña plaza comercial a lado del Parque Hundido, donde también estaba una discoteca gay de nombre L´Barón (así lo escribían). Recuerdo bien esta cantina porque fue el primer sitio donde obtuve información un poco más específica del "cáncer gay"; era un pequeño letrero escrito a mano y que decía, palabras más, palabras menos: "Cuídate de la nueva enfermedad. No te vengas adentro de nadie ni dejes que se vengan adentro de ti". Así nada más, escueto y simple. Con eso, uno podía inferir que la nueva enfermedad, el AIDS, que además no se podía curar con dos o tres inyecciones de antibióticos sino -por el contrario- te llevaba a la muerte segura, era transmitida a través del esperma. Tal y como lo decía el letrerito hice las cosas en adelante: evité a toda costa tener contacto con el semen de cualquier chico y, desde luego, nunca depositar el propio en el recto o boca de nadie.

Hasta esos días, toda la información con la que contábamos los gays de mi ciudad sólo hablaba de evitar el intercambio de esperma, pero nada más se sabía y sólo ocasionalmente nos enterábamos de las cifras de gays fallecidos en Nueva York, París, San Francisco, Los Ángeles....., pero aún nadie -hasta el momento- fallecía en México por la irrupción de la nueva enfermedad. Consecuentemente, el AIDS (que aún no se le llamaba SIDA) nos parecía algo lejano y que pronto sería frenado por los chingones científicos norteamericanos; era lo lógico en plenos años ochenta, los gringos lo podían todo..., hasta tener un vistoso movimiento de liberación de los homosexuales. Hoy sabemos que no fue ni ha sido aún así, y hablo de ambos casos.
Un poco de esa información que obtuve en aquella cantina, otro poco lo que se escuchaba esporádicamente en las noticias o leía en revistas, y un mucho el miedo y los afortunados enamoramientos que viví en los ochentas, me llevaron a modificar mis conductas sexuales de manera radical. Seguí siendo no monogámico, pero me sentía seguro al saber que mis parejas sexuales eran chicos casados supuestamente heterosexuales, miembros de mi grupo de amigos y de quienes sabía prácticamente todos sus movimientos. Con varios de ellos, tuve relaciones sexuales por más de siete años; yo era un refugio para su emoción homotípica...., y sabía que era el único.


Dos o tres años después, habiendo concluido ya mis estudios de licenciatura, mi amigo Sergio y yo nos entregamos a la euforia de la producción en vídeo y la fotografía. Organizábamos divertidas grabaciones en las casas de los amigos, en su casa o en la mía; producíamos vídeos para grupos de Rock poco conocidos (recuerdo el de Size, con mi amigo y ex-compañero de la escuela primaria, Illy Bleeding o Illy Godzila). También, fue la época en que comenzábamos a buscar nuestra independencia económica de la familia y poníamos ya cada quien su propio espacio, un departamento. Estábamos en una etapa de nuestras vidas realmente buena, productiva, exitosa, solvente; jóvenes en sus "late 20´s" buscando consolidar su seguridad profesional y económica.

Pero sucede que, súbitamente, Sergio comenzó a perder peso, se le inflamaban los ganglios linfáticos del cuello, axilas y púbis, y sus problemas intestinales eran recurrentes y hasta invalidantes; su salud se deterioraba fácilmente a la menor provocación y no parecía haber una razón lógica que lo explicara. Sus amigos comenzamos a sospechar lo peor y, de inmediato, tratamos -sin éxito- de animar a nuestro amigo para hacerse un check-up general. Nunca accedió. Creo que él sabía bien de qué se estaba tratando ese proceso. No fue sino hasta finales de 1987 cuando la salud de Sergio empeoró seriamente. Sus amigos, francamente alarmados por nuestras certezas de que se tratara de un caso real de SIDA (los síntomas se apegaban a la información que ya comenzábamos a conocer bien en México), le informamos a su madre la situación y ésta, como un ángel del cielo, lo sacó de su departamento, lo llevó para su casa y de inmediato lo internó en el hospital de Nutrición. Ahí se confirmaron nuestras sospechas; nuestro amado amigo Sergio estaba infectado con el virus del SIDA y sus días estaban contados. Recuerdo aún al joven médico que nos dio la terrible noticia, afuera de aquella habitación que ocupaba Sergio, en ese frío pasillo de pisos blancos, olor a alcohol y apresuradas enfermeras yendo y viniendo. Recuerdo también la actitud de su madre, enfrentando aquel difícil diagnóstico y llenándose de fuerzas para superar el reto de ayudar a su hijo a sobrevivir cualquiera de los muchos pronósticos adversos que salían y salían de la boca del doctor. Sus fuerzas de madre no le bastaron, ni a ella ni a mi amigo.
Sergio salió del hospital esa y otras dos veces; experimentaba recuperaciones casi milagrosas, sólo para enfrentar peores situaciones a las pocas semanas de su alta. Primero, cuando logró controlar el deterioro causado por los parásitos intestinales y hepáticos, las severas diarreas, fiebres y dolores de cabeza, al poco tiempo, en una linda mañana llena de sol, despertó con la mitad del cuerpo "entumido", víctima de un derrame cerebral que le dejó hemipléjico (con la mitad de su cuerpo inmóvil) para el resto de su vida. Mi amigo hizo un enorme esfuerzo por superar esa situación, y se movía de un lado a otro en su camioneta ignorando que literalmente arrastraba medio cuerpo. Después, vino el diagnóstico de una toxoplasmosis que le estaba destruyendo tejidos en órganos y músculos de su cuerpo, para lo que tenía que permanecer conectado a un suero por más de tres horas diarias. Recuerdo el olor a ajo que despedía su cuerpo por esos días, a causa del medicamento que recibía para combatir a esta nueva y agresiva infección. Poco a poco vinieron nuevos problemas con su vista, con su condición pulmonar y su estado general de salud, hasta que no pudo ya levantarse de la cama y finalmente murió (el 16 de febrero del 1990).

No acabábamos de llorar la muerte de Sergio, cuando supimos que Álvaro y su pareja estaban también infectados con el VIH; mi amado amigo, compañero de juegos y vecino de la colonia, supo de mi boca que estaba infectado cuando salimos del laboratorio del Hospital Metropolitano y abrí ansioso el sobre para conocer sus resultados, que tenía la certeza serían buenas noticias. "Positivo"...., no lo podía creer...., tuve que echar una segunda mirada a aquel papel. Álvaro quedó devastado, engarrotado en la puerta principal del nosocomio. Cinco años después, Álvaro perdía la vista rápidamente y por completo, pues un agresivo virus consumía a dentelladas partes de su cerebro, hasta que -después de una etapa de terrible ansiedad y pérdida de la razón- sus funciones vitales se fueron desconectando una tras otra. Me avisaron de su muerte -el 28 de abril de 1995- mientras estaba en mi trabajo; no fue sino hasta que concluyó aquella larga jornada parlamentaria cuando pude irme a reunir con su familia y con nuestros amigos.
Víctor, por su parte, comenzó la misma pesadilla con un súbito desmayo en el súper, en la Comercial Mexicana de la Costera Miguel Alemán, en Acapulco. Estuvo inconsciente por dos o tres horas ahí, recostado sobre los tapetes de la tienda y acompañado de nuestro querido Jaime Vite. Los estudios médicos dieron el resultado nefasto, pasó unos meses negros durante los que vio deteriorarse su salud, su gran corpulencia y su singular belleza, y poco más tarde murió en la Ciudad de México, en casa de sus padres, después de una serie de dolorosas y denigrantes enfermedades Y digo denigrantes, porque es terrible ver cómo seres tan cabales sucumben de forma tan indigna ante la abusiva enfermedad del SIDA.
Un año después, derrotado por la tristeza de la muerte de Álvaro, el amor de su vida, Daniel perdió rápida y definitivamente la salud, con fuertes problemas intestinales, pérdida de peso, ataques nerviosos y convulsivos, y finalmente murió, al segundo día de haber sido hospitalizado. Casualmente, su familia depositó sus cenizas justamente en la misma iglesia en la que están los restos de su gran amor: Álvaro. Fue casual el enterarme de su muerte, pues siendo su familia extremadamente católica, escondieron a Daniel, a su enfermedad y su misma muerte hasta donde pudieron. Fue cuando pasaba yo en mi bicicleta frente a la casa de Daniel, en la colonia Condesa, cuando me di cuenta de que estaban vaciándola su hermano (corresponsal en el Vaticano de cierta televisora, por cierto) y su recatada y joven esposa. En la calle, me acerqué a ella para preguntarle por mi amigo, y me dijo que acababa de fallecer y que esa noche habría una misa en su memoria; pero la elegante dama también me pidió no comunicar la noticia a nadie, a pesar de que Daniel había dejado una lista de amigos a los que deseaba se les diera aviso de su fallecimiento. Fui el único de sus amigos presente esa noche en la iglesia.

Más recientemente, Jaime se fue de nuestro lado, consumido por esa vorágine de fallas sistémicas, lamentos doloroso y deterioro irrefrenable que trae consigo el SIDA; ya al final, problemas derivados del citomegalovirus estuvieron aquejándole por meses y meses, pérdida parcial de la vista y finalmente daños hepáticos, quizás causados por el Sarcoma de Kaposi, lo llevaron a una hospitalización de emergencia de la que ya no pudo salir.
En fin, de aquel grupo de amigos que nos conocimos desde la época de la escuela secundaria, en nuestra temprana adolescencia, más de la mitad fallecieron ya y algunos más viven hoy con el VIH en su sangre, esclavizados por el resto de sus días a ingerir un rosario de medicamentos y a ajustarse a prohibiciones y limitaciones que, como no lo era antes, atentan directamente en contra de sus vidas. Pasan días buenos, otros realmente fatales, pero por fortuna aquí los tengo aún..., ¿hasta cuándo? Muchas historias más se han tejido desde la década de los ochenta y hasta la fecha, con personas a las que tuvimos cerca y que constituían parte del entorno en el que crecimos, del mundo que hemos conocido. Así de repente se van, desaparecen de nuestra historia de vida y para nunca jamás. Son tantos los muertos que prefiero no intentar aquí elaborar una lista de sus nombres, que en mis notas y diarios personales sí lo he hecho, pero debo decir que tengo la certeza de que así debieron sentirse los sobrevivientes de las guerras mundiales en Europa, del Holocausto o de fenómenos naturales devastadores (como en Tailandia, Indonesia o la India). De un momento a otro, así como así, muchas de las personas con las que te encontrabas en el antro, en las fiestas, en eventos o reuniones de amigos, desaparecen arrebatadas por la muerte para siempre y no las vuelves a ver jamás; sólo permanecen sus historias, su pálida imagen en tu memoria....., pero nada más.

[ Hablemos sin "pelos" ]


Bien es conocido por todos el término "Bareback" y para el que no lo conozca seguro es alguien que no está muy metido en el mundo de la comunidad LGBT pero a continuación hablaremos un poco sobre eso.

La palabra bareback tiene muchas connotaciones pero todas y cada una de ellas vierte en el mismo significado, por ejemplo muchos lo aplican como:







- Montar sin silla, haciendo alusión al mundo ecuestre (el de los caballos)


- Montar a pelo


- Coger a ráiz (si, con el acento en la A)
En pocas palabras consiste en sostener relaciones sexuales anales sin la protección del condón de latex. (Siempre en relaciones homosexuales)
Argumentos sobran cuando se trata de no usar el condón en las personas que practican el bareback, uno de los principales y más comunes es "no se siente lo mismo" "yo sólo sostengo relaciones con una persona y ambos somos seropositivos".


Pero realmente el problema va más allá de la fidelidad o de la confianza que se tenga mutuamente en una relación. Alejándonos de emitir cualquier juicio o pretender posar una actitud inquisidora mi intención sólo es profundizar un poco en el tema.
Ya que no todo es negativo cuando mencionamos la palabra bareback.
Aspectos positivos:
- Llevar a cabo una cogida sin condón siempre es muy placentero, y cualquiera que haya tenido sexo en ambas situaciones estará de acuerdo en que la sensación de introducir el pene en una cavidad anal sin condón resulta un tanto más delicioso que con la barrera de latex.


- En un punto de vista un tanto más filosófico; tener sexo sin condón une más a las parejas, haciendo que exista aún más intimidad de la que se tendría.


- Resulta más espontáneo tener sexo sin condón, ya que se evita la eterna búsqueda del condón al momento de querer penetrar a la pareja.


- Incluso en términos monetareos resulta positivo, dado que se dispende del gasto de los condones que muchas de las veces no resultan nada baratos (dependiendo de la marca, estílo y localidad donde se compren)


La otra cara de la moneda y la antí-tesis dicta que también existe un lado negativo:


- Si se lleva a cabo una relación sexual a pelo con una persona infectada de VIH o con una ITS (Infección de trasmisión sexual) Existe un elevado porcentaje de ser infectado por dicho virus.


Pues básicamente ése es el contra potencialmente más peligroso que deriva en muchas otras consecuencias que resultan bastante obvio hasta para el menos pensante. ¿verdad?
Las causas de que las personas homosexuales lleven a cabo el bareback son infinítas. Algunas simplemente son absurdas y ridículas; otras tantas involucran situaciones psicológicas y mentales bastante densas como:


- Hay personas que viven sólo para el hoy, y no piensan para nada en el futuro. Algunos hombres piensan que tienen que hacer todo lo que puedan con sus vidas ahora mismo, pues no esperan vivir por mucho tiempo.

- Existen hombres gays que se enfrentan cotidianamente a situaciones de baja autoestima. No piensan que valga la pena proteger su salud o su vida. La baja autoestima es común en la comunidad gay y está relacionada directamente con la manera en que la sociedad trata a los hombres homosexuales, con la discriminación y la homofobia.


-Muchos varones gays viven en la negación y creen que nunca se infectarán.


- Algunos, simplemente disfrutan más al hacerlo sin protección y creen que vale la pena correr el riesgo. Prefieren al contacto "piel con piel", desdeñando los riesgos.


Respeto la libre decisión de aquellos que practican el sexo anal sin protección, o bareback, como debo respetar a cualquiera que piense diferente a mi y que crea vehementemente en sus convicciones e ideas.
La información respecto al VIH-SIDA existe y es, hasta cierto punto, suficiente para que cualquier persona sexualmente activa reduzca significativamente el riesgo del contagio y la muerte temprana. Si una persona que está informada y conoce las formas y consecuencias del contagio aún así elige tener sexo anal desprotegido, o bareback, es una decisión que no puede ser criticada fácilmente, menos aún si también es el caso de su o sus parejas. Pero hacerlo simplemente por moda, desinformadamente, y sólo por experimentar un placer que otros aseguran digno de correr cualquier riesgo, me parece una franca y total estupidez. Los partidarios y promotores del sexo bareback tienen en sus manos una grave responsabilidad social, misma que espero sean capaces de entender y -sobre todo- comunicar; ¿cuál?....., aquí está dicha hasta el cansancio.


¿INCONGRUENCIA?

jueves, 16 de abril de 2009

[ ¿El triste? ]

El otro día escuchando una canción de José José cuyo título es precisamente idéntico al de éste post, recordé un poco los sucesos de mi vida de hace algún tiempo.

Vino rápidamente a mi mente el año pasado por estas fechas (semana santa-pascua) Que estaba al borde del quasi suicidio por una desilución amorosa, lloraba, no salía y me la pasaba haaartas horas escuchando la misma canción (Who Knew de Pink)

Lo más patético y vergonzoso de todo esto es que dicha decepción amorosa no había sucedido el año pasado sino dos años antes. en las mismas fechas de semana santa-pascua. Yo la verdad en dichas fechas era una persona totalmente distinta (ajá) O de plano no sé lo que me pasaba.

Muchas noches de no dormir por esas fechas me hicieron formular una misteriosa hipótesis, que cuando estamos enamorados muchas de las veces perdemos ésa capacidad asombrosa de pensar, o el sentido común y la lógica abandonan nuestro ser por completo y se toman unas merecidas vacaciones en...... ¿París?

Cualesquiera que sean los motivos el amor verdaderamente nos apendeja (literalmente) y hacemos, decimos y dejamos de hacer muchísimas cosas que en otro estado emocional quizás lo hubieramos pensado dos, tres, cuatro o cinco veces.


¿qué opinan ustedes?

domingo, 12 de abril de 2009

[ Nomás por machos ]

Ayer (¿o antier?) Sábado salí de farra con Leo, Pedro y Rodrigo, fue lo que yo llamaría una "noshe de mashos".

- la primera parada fue en California´s Bar.... el cual estaba a reventar de pura Vaquer-obvia! el lugar es agradable aunque últimamente ha perdido ése "click" que había, el cual significa que sólo hombres varoniles, de camisa, bota y sombrero entraban. Ahora también van chavos con vans, converse y brincolinas como las que van al Seven Sins...

- Después fuímos a conocer el nuevo bar de Carlos Ocegueda, Mamá diabla. El lugar está bien ubicado, alejado del bullicio de la zona rosa de Prisciliano Sánchez, está por La paz. La decoración es buena y la música y el ambiente son un tanto distintos a los demás bares, es más como cantina de "mashos" las bebidas son baratas. Lo único malo es un stripper feo que se la pasa bailando de mesa en mesa que resulta bastante nauseabundo ante mis ojos.


- Enseguida nos lanzamos al Siervo, un bar situado una cuadra antes de la central vieja de autobuses. El lugar es rudo lleno de gente que en primera instancia ni parece ser parte de la comunidad gay, pero en cuanto los ves besándose bigote con bigote te percatas de que si son re-putos!

- Ya por último sin Pedro que nos acompañara fuímos al Condado, por las nueve esquinas. nos topamos con cierto locutor de radio que todo mundo sabe que es gay excepto él. Tommy Power.

La noche termino muy bonita, con harto alcohol en la sangre y a las 3am, el taxista carísimo de las Europas que me cobra $100 aprovechándose de que tenía sueño y andaba medio pedo Y encima de todo se la pasó contándome su fracaso de vida marital! (como si fuera yo psicólogo)

El domingo me desperté temprano a pesar de la cruda para trabajar, fuí con Rodrigo a visitar al candidato a presidente municipal de Villa Corona, me invito a desayunar en un bufete muy rico que está casi llegando a las plazas outlet!
llegué a mi casa alrededor de las 4:30pm y me dormí hasta las 10:00pm!

Ahora no tengo sueño y ando viendo que hacer, mi novio me recomendó bajar una película porno que según él es buenísima llamada "Kamasutra Gay"


¿indirecta?


viernes, 10 de abril de 2009

[ Viernes Santo ]

Hoy es viernes Santo y oh si, estoy trabajando!
Tempranito (ajá) a las 09:00am sonó mi despertador y me dispuse a vestirme para comenzar una ardua labor trabajando como negro para vivir como blanco (ajá).

Mi linda mamá fue a mi habitación y me dijo que ya era tarde y que tenía que desayunar antes de irme, Me dijo que si me preparaba un delicioso y magnanimo desayuno intercontinental que constaba de un huevo con jamón y agua de jamaica (un verdadero manjar)
Después me fuí a lavar la boca, peinar y esas cosas superficiales que hacemos las jotitas como ponerme mis cremitas, enchinarme las pestañas, desarrugar la estola y sacárle filo a los tacones.

Ya comenzará la semana pascua y no sé que haré. Lo único que sé es que trabajaré hasta el miércoles aquí en el partido y quizás salga de vacaciones.

En fin.. Tengo hambre y TODO está cerrado.. ¿qué comeré?
¿alguien podrá traerme comidita? =(

martes, 7 de abril de 2009

[ Libre derecho a decidir II ]

Mucho se ha escuchado sobre la despenalización del aborto y acerca de darle el derecho a la mujer que decida sobre su propio cuerpo.
Muchas personas simplemente opinan al escuchar el tema:


- "Pues que usen condón"

- "Que cierren las patas"

- "Ya dejen de andar de putas"


Pero lo que ésas personas no comprenden es que muchas mujeres en comunidades indigenas, en situación de pobreza extrema y condiciones donde algunas no tienen ni los más básicos estudios de primaria desconocen sobre cultura de prevención de ITS y planificación familiar. O muchas no se embarazan porque así lo desean, sino porque son víctimas de violación o la misma ignorancia no les permite tener un juicio científico sobre las consecuencias que se advenirán después.


Con esto no trato de justificar a nadie ni a nada. Simplemente amplio un poco el panorama actual. Y es que para muchos es fácil simplemente juzgar a las mujeres por abortar y tacharlas de malas o perversas, asesinas o golfas. Pero no nos damos la oportunidad de analizar la situación en general y opinamos ciegamente.


(continuará)

domingo, 5 de abril de 2009

[ Libre derecho de decidir ]

Una conocida mía se enteró, el año pasado, que estaba embarazada. Estaba feliz. Empezó a soñar con nombres para su bebé, especular con qué sexo tendría, pensar cómo sería. La ilusión se desmoronó a los pocos meses: el bebé venía con una deformidad congénita masiva que haría imposible que sobreviviera fuera de la matriz. Específicamente, el bebé estaba desarrollando sus órganos (corazón, hígado) fuera de su cuerpo, por lo que al estar fuera de la madre moriría.





Además de esta demoledora tragedia, la mujer sufría otro infortunio más: vive en chile. Dicho país está entre el tres por ciento de países occidentales donde todas las formas de aborto son ilegales, incluyendo el aborto terapéutico.Así, esta mujer pasó meses cargando en su vientre un niño condenado a morir. Imposibilitada de no sentir amor o apego con el ser que crecía en su vientre, todo el embarazo fue un luto cruel, largo e insensato, producto de una de las últimas joyitas de la dictadura pinochetista.

jueves, 2 de abril de 2009

[ Derechos sexuales & Reproductivos ]

Hace más de 24 años que fue creada el acta donde se plasman todos los derechos sexuales y reproductivos que son de carácter universal. Justo en el marco de la Reunión Internacional sobre Mujeres y Salud en Ámsterdam.
En ellos se encuentra el poder que nos informa que tenemos la última palabra y la decisión de lo que hacemos con nuestro cuerpo y a quien le expresamos nuestro amor.
Y tal como lo marca uno de los postulados “Derecho al ejercicio libre y autónomo de las orientaciones sexuales” Parece ser que en pleno siglo XXI esto no sea una realidad palpable aún en la mayoría de los municipios de Jalisco.


Ya que en algunos reglamentos de policía y buen gobierno queda estrictamente prohibido y es merecedor a una sanción el “presentar conductas desviadas” o “manifestarse públicamente conductas homosexuales” tal es el caso de el municipio de Puerto Vallarta, Cd Guzmán y Guadalajara.
Siendo la zona metropolitana un área donde estadísticamente se presenta una alta concentración de diversidad sexual es increíble que no se reconozca su existencia y peor aún; que no se les considere un ciudadano con derechos pero irónicamente si con responsabilidades tales como pagos de impuestos y contribuciones tributarias.


Sería fantástico que nuestros modelos familiares mono parentales fueran reconocidos y aceptados dentro de la sociedad jalisciense. Al igual que pudiéramos accesar a los servicios de nuestras parejas homosexuales tales como el seguro social o recibir una herencia por el sólo hecho de ser su pareja.
En el Distrito Federal ya logramos que las parejas homosexuales pudieran ser reconocidas ante la ley y pudieran ser acreedores de beneficios como los que gozan los matrimonios heterosexuales, aunque no es considerado una unión civil completamente las sociedades de convivencia son un gran avance en cuanto a exigencia de derechos homosexuales se refiere. Quizás en algún futuro no muy lejano en Jalisco también pueda llevarse a cabo contratos de sociedad entre personas del mismo sexo o quizás matrimonio como tal.


Los derechos sexuales y reproductivos son 13 y te los mencionamos a continuación:


1.- Derecho a decidir de forma libre sobre mi cuerpo y mi sexualidad.
2.- Derecho a ejercer y disfrutar plenamente mi vida sexual.
3.- Derecho a manifestar públicamente mis afectos.
4.- Derecho a decidir con quién compartir mi vida y mi sexualidad.
5.- Derecho al respeto de mi intimidad y mi vida privada.
6.-Derecho a vivir libre de violencia sexual.
7.- Derecho a la libertad reproductiva.
8.- Derecho a la igualdad de oportunidades y a la equidad.
9.- Derechos a vivir libre de toda discriminación
10.-Derecho a la información completa, científica y laica sobre la sexualidad.
11.-Derecho a la educación sexual.
12.-Derecho a los servicios de salud sexual y a la salud reproductiva.
13.-Derecho a la participación en las políticas públicas sobre sexualidad.

miércoles, 1 de abril de 2009

[ En el tren ]

Todo iba normal éste lunes, salí de mi trabajo como cualquier otro día a las 2pm apróximadamente y me dispuse a tomar el tren ligero.

Allí en la estación Atemajac. Cuando me subí fue que lo mire, su mirada estaba fijamente sobre mí y no la despegaba.

Constantemente lo miraba de reojo y él sólo se sonreía conmigo como apenado por haberlo descubierto.

Así pasaron las estaciones hasta llegar a Juárez donde pensé que nos separaríamos.


Pero no fue así, ambos nos bajamos allí y caminamos a la par. Él mirándome y yo sintiendo su mirada sobre mi cuerpo. Al subir las escaleras eléctricas se me pone al parejo y me dice:


- Hola! Me llamo Jair y tú?

- David... Respondí titubeando!

- A qué te dedicas David? ¡Mucho Gusto!

- Estudio psicología y trabajo para un partido político


No había terminado mi oración cuando me dijo:


- Fantástico yo estudio medicina en la Uag y la verdad en cuanto te vi me pareciste agradable y simpático! ¿crees que podamos ir a tomar un café o algo en la noche?


Antes de poderle responde me dio su tarjeta y anotó su celular por detrás con un corazón al final y una carita feliz muy bonita.


Me dijo "llámame, ojalá podamos ir a beber algo" y se marchó algo apresurado debido a que iba tarde a la escuela.


Caminé durante un rato leyendo y releyendo la tarjetita y admirando el corazón y la carita feliz plasmada tan entusiastamente en la tarjeta.


Llegué a la esquina de mi trabajo hice bolita la tarjeta y la tiré.....